Los estudios han demostrado que los hombres tienen una gran influencia en las decisiones de las parejas sobre la planificación familiar (PF) y que su participación en la PF y otros servicios de salud puede ser beneficioso para sus parejas, sus hijos y para ellos mismos. Sin embargo, en muchos países, las ideas profundamente arraigadas sobre los roles de género apropiados, así como los mitos y conceptos erróneos sobre la PF, crean barreras para el apoyo y la participación de los hombres en los servicios de PF.