En una variedad de formas que se adaptan a sus contextos, los países de todo el mundo han adaptado la orientación internacional sobre la prestación de servicios de planificación familiar durante la pandemia de COVID-19. El seguimiento de la medida en que estas nuevas políticas tienen éxito en mantener el acceso de las mujeres a una atención segura y de alta calidad proporcionará lecciones valiosas para las respuestas a futuras emergencias de salud pública.
La crónica de la introducción rápida y eficiente en Malawi del DMPA subcutáneo autoinyectable (DMPA-SC) en la combinación de métodos es un modelo de trabajo en equipo y coordinación. Aunque este proceso suele tardar unos 10 años, Malawi lo logró en menos de tres. El DMPA-SC autoinyectable personifica el ideal del autocuidado al empoderar a las mujeres para que aprendan a inyectarse y tiene el beneficio adicional de ayudar a los clientes a evitar clínicas concurridas durante la pandemia de COVID-19.
Los estudios han demostrado que los hombres tienen una gran influencia en las decisiones de las parejas sobre la planificación familiar (PF) y que su participación en la PF y otros servicios de salud puede ser beneficioso para sus parejas, sus hijos y para ellos mismos. Sin embargo, en muchos países, las ideas profundamente arraigadas sobre los roles de género apropiados, así como los mitos y conceptos erróneos sobre la PF, crean barreras para el apoyo y la participación de los hombres en los servicios de PF.