Dados los antecedentes médicos de la Dra. Fonkwo, enfatizó que esta pregunta debe plantearse una y otra vez. Afirmó que si un médico no recibe suficiente capacitación médica para brindar servicios de salud a los adolescentes, no estarán equipados para brindar los servicios. La formación médica debe estructurarse para atender las necesidades de los adolescentes. Por último, el Dr. Fonkwo sugirió varios elementos que pueden contribuir a mejores resultados: enfoques a nivel de sistema, atención a la capacitación y los cursos, educación médica continua, mecanismos de retroalimentación e indicadores nacionales.
El Dr. Muriuki, quien también tiene experiencia clínica, comentó que cuando el proveedor falla, el cliente se acuerda. Varios problemas, como los largos días de trabajo, pueden influir en la forma en que tratan a sus pacientes. El Dr. Muriuki señaló que los proveedores son miembros de una comunidad y tienen sus propios valores y problemas. El sistema de salud espera que, al ingresar a una clínica, los proveedores dejen de lado sus propias creencias y prejuicios, pero el sistema hace poco para ayudar a los proveedores a navegar el conflicto potencial entre quiénes son y qué hacen, para garantizar que los clientes reciban con servicios imparciales. El sesgo del proveedor debe abordarse dentro del sistema para que no solo estemos apuntando al resultado final de una falla del sistema.
La Sra. Streifel agregó que el sesgo del proveedor puede hacer que las mujeres usen métodos anticonceptivos que no sean los de su propia elección (métodos no preferidos), lo que puede resultar en que abandonen ese método (interrupción de los anticonceptivos). La Sra. Streifel señaló que, según un Análisis PRB en las políticas de 22 países, solo 4 países de 22 apoyan el acceso de los jóvenes a los servicios de planificación familiar sin el consentimiento de ambos padres y cónyuges; solo 10 apoyan una gama completa de opciones de planificación familiar para satisfacer las necesidades de los jóvenes. Políticas que eliminan los requisitos para el consentimiento de terceros y las restricciones son necesarias para promover el uso de anticonceptivos entre los jóvenes. Expresó que la capacitación de los proveedores debe incluir la clarificación de valores y el conocimiento del desarrollo cognitivo de los jóvenes. La Sra. Streifel enfatizó que los proveedores deben tomar un historial de casos, proporcionar información sobre cómo manejar los efectos secundarios y disipar los mitos sobre los métodos anticonceptivos. También afirmó que se debe capacitar a todos los que trabajan en el sistema de salud, ya que cualquiera puede incidir en la visita de un adolescente. La Sra. Streifel cerró esta sección con un comentario de que dado que los jóvenes solteros prefieren obtener anticonceptivos del sector privado e informal, el personal de las farmacias y droguerías también debería recibir capacitación para servir mejor a los jóvenes.