Este artículo resume las lecciones de género y planificación familiar aprendidas de un estudio reciente del Programa de Supervivencia Materna e Infantil (MCSP) financiado por USAID, realizado en dos provincias de Mozambique. Wmi explorar cómo los hallazgos de la investigación del MCSP son relevantes para nuestra comprensión del sesgo de género y cómo se puede abordar en el diseño de programas de planificación familiar.
El Programa de Supervivencia Materna e Infantil (MCSP) financiado por USAID publicó recientemente hallazgos de un estudio en dos provincias de Mozambique.
El estudio de dos años fomentó la comunicación de pareja a través de diálogos grupales (palestras), consejería de pareja y capacitación para trabajadores de la salud. El estudio midió qué tan bien el proyecto involucró a los hombres en la atención prenatal, el uso de la planificación familiar moderna y la preparación para el parto. También analizó cómo las parejas toman decisiones sobre la planificación familiar. El estudio de MCSP Mozambique fue cualitativo, lo que significa que recopiló datos no numéricos (sin números).
Los programas de planificación familiar benefician a todos, incluidos los hombres. Es por eso que muchos programas no solo incluyen a hombres, sino que también tienen como objetivo desafiar las normas de género dañinas. Algunas normas de género pueden impedir que tanto las mujeres como los hombres utilicen métodos anticonceptivos modernos.
Exploramos cómo los hallazgos de la investigación de MCSP son relevantes para nuestra comprensión del sesgo de género y cómo se puede abordar en el diseño de programas de planificación familiar.
Los programas “transformadores de género” tienen como objetivo examinar, cuestionar y cambiar las normas y el comportamiento de género de una manera que apoye la equidad y la igualdad de género.
¿Cómo se compara el estudio MCSP con lo que ya sabemos? Los datos de Family Planning 2020 (FP2020) nos dicen que la mayoría de las mujeres tienen poder de decisión único o conjunto en lo que respecta a la anticoncepción.
En comparación con estos grandes conjuntos de datos, el estudio de MCSP se dirigió a un pequeño número de personas, y solo en dos provincias. Pero un hallazgo particular refuerza la idea de que al diseñar un programa con conciencia de género, el contexto importa. En el estudio de MCSP Mozambique, los miembros de la comunidad y los proveedores de salud tenían puntos de vista diferentes sobre cómo se tomaban las decisiones de planificación familiar. Más de la mitad de los hombres y mujeres del estudio informaron que tomaban decisiones juntos. Pero los proveedores informaron algo diferente: que solo los hombres toman decisiones sobre la planificación familiar.
Los programas de planificación familiar deben tener múltiples estrategias para abordar el sesgo de género para ser efectivos. Grandes conjuntos de datos pueden mostrar tendencias globales o nacionales. Estudios más pequeños, como este, pueden mostrar la historia detrás de los números y resaltar las diferencias localizadas.
Podemos aprender mucho de este estudio de MCSP en Mozambique. Una lección importante es que las percepciones de la toma de decisiones pueden variar. La investigación debe examinar y dar cuenta de estas diferencias. Preguntar a una amplia gama de participantes de diversos orígenes debe ser el estándar en la investigación comunitaria sobre la toma de decisiones sobre planificación familiar. Esto tiene implicaciones de tiempo y financiación para la investigación. Pero el valor de los datos obtenidos bien vale la pena, ya que pueden ayudarnos a ser más receptivos en el diseño e implementación de programas.